martes, 10 de enero de 2012

CEREZO EN LA BOLSA (LA VIDA TE DA SORPRESAS)


El pasado lunes tuvo lugar en el Palacio de la Bolsa de Madrid, patrocinada por la Fundación Atlético de Madrid, la presentación del libro “FICHAJES”, a cargo de Enrique Cerezo Torres. Si, han oído ustedes bien, el mismo que viste y calza y gasta ese pelazo ya plateado por el paso del tiempo, veinticinco años después de que, con idéntica mata de pelo equivalente al gorro de Daniel Boone, pero de un negro azabache sin par, fuera cooperador necesario en un delito de apropiación indebida del Club Atlético de Madrid SAD. 

Y tras someter durante años al Atleti a un saqueo sistemático junto a sus compinches, según palabras del Fiscal Castresana, ser testigo mudo además de la intervención judicial, de cómo condenaban a su socio Miguel Ángel Gil Marín por estafar al Club -hito sin parangón en la historia mundial del fútbol ese de estafar al Club que uno posee y dirige, por cierto-,  ser espectador activo en fraudes de ley en las ampliaciones de capital de la SAD, según ha manifestado la Audiencia Provincial de Madrid, consentir que el citado Gil Marín perciba un sueldo anual de más de un millón de euros, en contravención de los Estatutos Sociales, que tenían  vetado hasta ahora esos emolumentos si el Club daba pérdidas, como viene siendo el caso, que ha asistido impasible y con cara de póker al endeudamiento de la institución con Hacienda hasta llegar a los 300 kilos, además de arruinar al Atlético de Madrid tanto económicamente como en su faceta deportiva, ese mismo personaje que, a pesar de detentar ilegítimamente el 20 % de las acciones dela SAD, no ha movido un dedo por impedir todo las tropelías expuestas, hoy, ha tenido el honor y suponemos que el placer, de  presentar un libro solidario sobre los fichajes en el fútbol, despachándose en su breve y como de costumbre leída de carrerilla locución inicial del acto, agárrense los machos, con una defensa a ultranza de la gestión eficiente y la responsabilidad social. Y se ha quedado tan pancho.

Que personajes de esta calaña osen enfundarse el disfraz de la honestidad y la eficiencia provoca un profundo malestar, máxime cuando el libro, encima, es solidario, dado que parte de los beneficios que se obtengan con su venta irán destinados al proyecto 'A team for the world' en Kenia.

Cerezo Torres estuvo flanqueado en su intervención por otros dos presidentes que le dedicaron todo tipo de alabanzas y parabienes, ante la complacencia y beneplácito de la mayoría de los asistentes y el estupor, supongo, de alguno de ellos  -aunque fuera en lo más hondo-, a parte del de quien suscribe. Los contertulios presidentes afectos al mundo del deporte no eran otros que José Luis Astiazarán (LFP) y Alejandro Blanco (COE), los cuales cerraron el acto, dejando este último una perla que no conviene pasar por alto: “ La Fundación del Atlético de Madrid es un punto de referencia en el ámbito del Deporte en el mundo”, para concluir con la advertencia de que no se ha ponderado lo suficiente a Enrique Cerezo, “un lujo como persona y presidente”.

Como comprenderán, después de oír tales lisonjas y de ver los arrumacos y cucamonas que se despachaban ambos personajes, a uno ya no le ha quedado cuerpo para asistir al vino español que se ofrecía tras el evento.

Digna de mención, sin embargo, fue la intervención de Don Juan Velarde, Consejero del Tribunal de Cuentas, sí ese mismo que ha condenado a los Gil a pagar 105 kilos al Ayuntamiento de Marbella, qué curioso, ¿verdad ?, quien en su erudita intervención destacó que el fútbol supone el 2,5 del PIB del sector servicios patrio.

Cabe destacar igualmente la del Representante de la Comisión Europea de Deporte, Don Francisco Fonseca, que puso el énfasis en que, a pesar del carácter poco intervencionista de la Comisión, iba a ser más proactiva a la hora de abordar tres aspectos básicos en el fútbol y el deporte en general:

-       La equiparación penal del  dopaje al tráfico de drogas.
-       La protección de los jóvenes talentos deportivos, vigilando que no se vulnere la Convención de la Naciones Unidas de los derechos de la infancia.
-       La corrupción y el blanqueo de capitales -ignoro si conocerá que Van Doorn no es un pintor flamenco ni un exciclista belga- .

Don Plácido Rodriguez, miembro del Observatorio Económico del Deporte, señaló que la subida del 7% en el IRPF iba a encarecer aún más las retribuciones de los jugadores, dado que su ficha suele expresarse en términos netos e hizo mención d ela mala imagen del fútbol español en Europa, al ser el país que más clubes tiene “under administration”.

Por último, además del representante de la editorial Difusiones Jurídicas, editora del libro, cabe destacar la intervención de uno de sus autores, el profesor de  Universidad Don Ignacio Urrutia, quien manifestó que la vocación del libro, en el cual se ha trabajado desde 2007 y refleja datos del 2000 a la actualidad, es la de ayudar a los clubes a obtener el valor razonable de los jugadores, mediante el cálculo de los ratios adecuados para comprar y vender. Ha ofrecido dos ejemplos de incapacidad de previsión, con los casos de Anelka y Diego –el nuestro, de momento-.

Ha comentado que se mueven 900 millones anuales en fichajes en unas 50 operaciones de media.

Igualmente ha detallado por medio de una tabla cuál es el valor ponderado de las plantillas de primera División, situando al Atleti en sexta posición, tras Madrid, Barcelona, Sevilla, Málaga y Villarreal y por delante del Valencia y Bilbao, deduciendo que su valor teórico está cinco puntos por debajo de su valor real, al ocupar la plaza undécima en la clasificación.

Otros datos ofrecidos en la comparecencia, para los amantes de las estadísticas, “el fútbol es la 17ª economía mundial” (Astiazarán) o “15 millones de personas trabajan en el deporte en Europa” (Blanco). 

El libro, escrito por Germán Robles, director de la Fundación, el citado Ignacio Urrutia de Hoyos y Fernando Martín, trata el éxito económico en el reclutamiento de deportistas profesionales y tiene pinta de ser interesante y bastante esclarecedor de algunos aspectos económicos hasta ahora no sacados a la luz, pero el evento se ha visto empañado por la presencia ilógica y delirante de Enrique Cerezo, dados sus nefastos antecedentes como gestor deportivo y su catadura moral, que sin embargo, ha sido pasada por alto, entre loas y zalamerías impostadas, por los conferenciantes y los asistentes, todos de la casa, entre los que se encontraron varios Consejeros del Club, y entre otros Oscar Gil Marín, uno de los condenados por el Tribunal de Cuentas, los incombustibles Adelardo y Collar, además de Manolo Sánchez Delgado y Quique Ramos.

Vivir para ver.

 

jueves, 5 de enero de 2012

Y REYES NO LLEGÓ A SU NOCHE.

No por esperado y en mi caso, incluso por deseado dado lo intranscendente de su presencia en el Atleti, deja de ser un síntoma más de la pandemia que está sufriendo el mundo rojiblanco en los últimos años.  Y es que, efectivamente, la salida de Reyes no es más que la evolución lógica de los acontecimientos que habían venido anunciándose por parte de los medios, tras la primicia que los voceros oficiales del reino gilista lanzaran a los cuatro vientos hace unos días. Simeone no ha tenido margen de reacción alguno y ya desde que puso el pie en Barajas se le recibió con “el caso Reyes” como punta de lanza. Avisado supongo que vendría. Lo peor puede estar por llegar a la vuelta de cualquier esquina y, ahí, veremos la reacción de un entrenador con personalidad, carisma y carácter, ante la nueva chanza del destino que promueva el mejor gestor del año. Qué les voy a contar que ustedes ya no sepan.

Pero sí quiero hacer una reflexión sobre lo que antes denominaba la pandemia del Atleti. Desde la salida de Heitinga, una especie de infección incontrolable se ha  expandido por el vestuario rojiblanco en forma de inesperados y súbitos adioses, afectando a los jugadores que en principio, por su calidad o cariño de la afición, no parecían estar llamados a salir del Club. Así, el propio Heitinga o Ujfalusi, parecían tener el favor y complicidad de la grada, dado su pundonor y entrega, por encima de su calidad futbolística, no mejorada por otra parte con sus sustitutos, a pesar de no ser tan difícil. Maxi, Simao y Forlán , aún encontrándose en el otoño de su carrera, atesoraban méritos y calidad suficientes como para no haber salido, al menos en las condiciones en que lo hicieron, gratis o casi gratis, tres verdaderos chollos para los equipos en los que ingresaron. De Gea y Agüero, igualmente afectados por la epidemia del adiós a pesar de su calidad y proyección, se fueron por la puerta de atrás, provocando un clima de crispada sospecha de traición en la grada,  alimentado convenientemente desde la zona innoble de Virgen del Puerto a base de ocultaciones y  falacias. Y ahora, a Reyes, que ha pasado de ser aclamado por la sorprendente y desnortada afición del Calderón, incluso en la presentación de Simeone, ya se le empieza a tildar de pesetero y mercenario, como anteriormente a muchos de los tristemente desaparecidos del Once Supercampeón de Europa.

En cualquier caso, si han resultado lamentables todas estas espantadas, a la par que infructuosas, dado que los sustitutos, ya sea por falta de calidad o por venir adquiridos a préstamo o a pachas con un grupo inversor y con un futuro incierto en el Atleti, lo peor es el poso que queda como consecuencia de todas estas salidas. Lo más doloroso es la imagen de una entidad que cada vez está más cerca del nivel de esa alcantarilla de la que salía el regresado Mono Burgos, tras el ascenso, que de aquellos años de gloria que por historia, presupuesto y afición, debería haber seguido disfrutando este Club.

Lo insufrible es la imagen de empresa de compraventa de jugadores, del trinque y el dinero fácil, que nos está convirtiendo en el hazmerreír de Europa y en un Club apestado, al que nadie quiere venir por su grandeza, sino por la condición de trampolín a otros de mayor prestigio actual o porque se lo impongan sus agentes en cualquier suerte de chanchullo al uso habitual del grupo  “Calam Mendes y Quilón, lo que importa es la comisión”.

Lo indecoroso para el Club  es que Elías diga que somos inferiores al Sporting de Lisboa, que Salvio, a pesar de que Simeone parezca apostar por él, se deje querer por el Benfica o que Sinama dejara claro cuando partió que por muchos futbolistas y entrenadores que se fueran de aquí el problema seguiría.

Lo denigrante es que a cualquiera que se le ofrezca irse del Atleti no se lo piense ni un segundo y coja la puerta.

Ya va siendo hora de atajar la peste, de sofocar la pandemia y de que sean otros los que hagan mutis por el foro. Mientras tanto,  la alcantarilla seguirá siendo el umbral pendiente de cruzar.